Warlord: Drows vs Silvanos

El jueves Bairrin y servidor jugamos nuestra primera partida seria de Warlord después del modo "aventureros" y alguna partida a menos puntos por mi parte. La batalla fue a 1000 puntos; los considerados de torneo, y el tamaño más adecuado para una batalla de Warlord.
Tenéis el punto de vista y las conclusiones de Bairrin en su blog.

Jugué con drows y quería que la lista reflejase lo correosos y puñeteros que son estos individuos. Quizás no fuese la lista más broken, pero estaba llena de tipos traicioneros y jugarretas de la infraoscuridad. La asesina con pistola ballesta y botas doomshade eran un buen ejemplo (muahahaha!).

Preparé el campo de  batalla de forma que fuese lo más simétrico posible, pero pronto se vio que, si bien los bosques podían ser buena cosa para los elfos de Bairrin en principio... también obstaculizaban la línea de visión de sus arqueros. Además no tardó en hacerse evidente que las miniaturas con la habilidad blink tienen una movilidad asombrosa. Para no enrollarnos demasiado diremos que blink hace que las miniaturas no se muevan, si no que desaparezcan del punto A y aparezcan en el punto B ignorando toda escenografía.

Los orejas picudas solucionan sus élficas disputas al estilo Noldor

Durante la partida tuve bastante suerte. Quizás las activaciones no fueron tan importantes como podrían parecer a simple vista, tan solo hubo un punto crítico en el que la victoria ya parecía una conclusión evidente. Las tropas de mi demonio arácnido contuvieron a la warlord de Bairrin en mi flanco izquierdo, mientras que mis drows barrían sin oposición el centro y el flanco derecho. Aquí habría que darle créditos a Avrix Dirthe -del que incluí dos copias como los amantes/guardaespaldas de mi ginócrata-; en una escaramuza previa contra cruzados ya me había dado muestras de lo machaca que puede ser y aquí confirmó su talento.

También habría que destacar a las (no)bestias desplazadoras. Me encantan estos bichos; su movilidad, su dureza, las tortas que pegan... y sobre todo la regla "displaced", que es unas risas.
Aunque quizás lo mejor sea que son tan o más buenos cuando combaten defensivamente en el turno del contrario. Esto permite que, una vez trabados en combate, puedas invertir la iniciativa en otras tropas.
Muy, muy buenas. Puse dos en mi lista: doble diversión.

Tentáculos y elfas... de aquí no puede salir nada bueno

En cualquier caso se notó que ambos estábamos bastante verdes. Bairrin olvidó una habilidad determinante de su hombre árbol, yo olvidé mover algunas miniaturas...
Warlord es un juego brillante en la sencillez de sus mecanismos, pero requiere mucha atención en el tema de las reglas especiales de cada miniatura. Estas son cruciales para darle el carácter adecuado a cada modelo, pero requieren mucha concentración. O al menos estar muy rodado para no olvidar en qué es bueno tu fichaje estrella.

Por cierto, para despejar alguna duda/confusión que he leído por la red: Warlord NO depende de las miniaturas de Reaper. Se puede jugar perfectamente con las miniaturas que tengas por casa y adaptar sus características a otros mundos es sencillo y con buen resultado. De hecho -como decía- la primera vez que jugué con Bairrin adaptamos Warlord a un enfrentamiento entre dos bandas de aventureros (buenos contra malos) en un mundo D&D a típico.
También merece la pena recordar que tenéis Warlord gratis y en castellano en la página de Cargad. Además de una serie de artículos en su e-zine.

Mi demonio arácnido y su prole dan buena cuenta de los débiles elfos de la superficie