Esta noche me sorprendía con esta noticia en Magic Madrid. Un hecho del mundillo friki que ha saltado a la prensa del Mundo Real (TM), desde su (imagino) fuente en Europa Press hasta diarios del grupo Vocento o prensa especializada como El Economista.
No voy a copypastearla cuando puedo dejaros en enlace aquí (por si acaso mirror aquí, aquí y aquí). Cuando la leáis volvéis y seguimos en el blog.
¿Enterados? ¿Sí? Pues vamos adelante con la parte de opinión...
La teoría es que el mercado secundario de Magic (es decir, la venta de las cartas una vez abiertos los sobres) está sujeto a las leyes de la oferta y la demanda. Como todo en la vida esto es así en teoría. ¿Por qué? porque (también como todo en la vida) las cartas están sujetas a valores especulativos.
Hay especulación a pequeña escala como, por ejemplo, cuando un particular abre un sobre, estima que X carta subirá de precio, y la guarda en un cajón para cambiarla o venderla cuando los tiempos sean propicios.
Esta es una acción particular que no es ni buena ni mala, y solo el tiempo y la capacidad de visión del interesado determinarán el éxito de su decisión sin afectar a nadie.
Pero, ¿qué pasa cuando quien se dedica a la especulación es una tienda? ¿y si es un grupo de tiendas importantes? ¿y si es una tienda MUY grande? ¿y si esas tiendas convierten sus precios subjetivos en precios reales?
En los oscuros días del inicio de internet (o -aun peor- en aquella especie de Mordor triunfante que era el mundo antes de internet) nadie podía dar un valor objetivo a las cartas. Sabíamos que una carta era rara, infrecuente o común y -aunque claramente veíamos que unas cartas eran mejores que otras aun dentro de su mismo nivel de rareza- cuando realizábamos un cambio lo hacíamos añadiendo cartas a la balanza hasta que ambos jugadores estaban satisfechos.
Todo eso cambió cuando empezaron a aparecer revistas especializadas. Estas revistas incluían en cada entrega un listado completo de las cartas existentes así como su valor (por aquel entonces en pesetas). Aquello era estupendo, ahora nadie iba a timarnos porque conocíamos el valor real de nuestras cartas.
¿Real? No tan deprisa, amigo. Indudablemente la oferta y la demanda tenían un papel importante en este asunto; si un Black Lotus es muy raro (hay pocos ejemplares) y mucha gente lo quiere su precio subirá. Pero, ¿y si una de las partes interesadas estaba en situación de adecuar el precio "oficial" a sus propios intereses?
No voy a dar nombres diciendo que determinada(s) tienda(s) lo hacían con alevosía: quedaría feo que fuese tan evidente. Pero siempre ha sido un secreto a voces que determinada(s) tienda(s) de Madrid estaban detrás de todo aquel asunto editorial.
Al principio no nos dábamos cuenta, claro. Estábamos ocupados haciendo Channel-Fireball o sufriendo el mazo de Stasis+Serra Angel de algún amiguete, pero el tiempo nos ha dado la madurez y la perspectiva para darnos cuenta de quién estaba detrás del teatrillo de títeres.
Aquel chiringuito ha funcionado estupendamente hasta que los jugadores empezaron a utilizar internet para cambiar y -sobre todo- vender cartas. En un principio fue por eBay (y aun se sigue vendiendo allí), pero la hecatombe llegó con Magic Card Market.
¿Qué es Magic Card Market (en adelante MKM por sus siglas germanas)? MKM es una plataforma diseñada por un vendedor profesional alemán. En ella cualquiera puede vender y comprar cartas, directamente entre particulares o entre los vendedores profesionales que quieran participar de este mercado. Tú pones el precio y a quien la parezca bien te lo compra. Tan fácil (quítame allí una pequeña comisión por parte de MKM [y de PayPal, claro] porque esto tampoco es por amor al arte).
Y con MKM llegó el escándalo. Las tiendas estaban que echaban pestes. Muy reseñablemente tiendas grandes de la capital del reino. Tiendas que estaban detrás de las revistas. Y/o tiendas como las que han sido sancionadas por la Comisión Nacional de la Competencia.
¿Qué pasaba? Pues que la oferta y la demanda empezaban a funcionar sin intoxicaciones. Y es que a todos nos encanta el capitalismo y el libre mercado cuando las perspectivas son buenas pero, cuando nos vienen dadas, ¡oiga! póngame usted unos aranceles o haga algo.
Está claro que algunas cartas, como las tierras dobles (también llamadas duals), eran caras porque hay pocas y hay mucha demanda. Pero, ¿y las cartas que fueron buenas, hay pocas, pero que ahora no juega nadie?
Ahí, amiguetes, es donde se ve claramente de qué va esto de la especulación por parte de las grandes tiendas.
Pondré un ejemplo: el morfoide. El morfoide es un bicho que era la leche. Hará unos ocho años... porque ya no lo juega nadie. Es decir, la demanda es nula. Si la demanda es nula el precio debería caer. No digo yo que lo regalen a 1 euro, lo que digo es que nos fijemos en MKM y cómo los particulares valoran esa carta.
A día de hoy los precios de un morfoide en MKM oscilan entre los 2,5 y los 4 euros (tienes alrededor de 100 disponibles a ese precio, cualquier zumbado está en su derecho de pretender venderlo a 10).
Miremos -también a día de hoy- el precio del morfoide en dos de esas tiendas madrileñas multadas por prácticas comerciales ilegales: entre 14 y 20 euros. Llamativo, ¿verdad?
Frecuentemente (y no hace mucho en un conocido podcast) oímos a esas tiendas quejarse de que sus precios son más caros porque ellos tienen una serie de gastos inherentes (impuestos, alquileres...) y en MKM cualquier particular vende las postalitas que le sobran. Es un hecho claro y sin contestación posible, todos sabemos que es más barato comprar un producto en fábrica o de segunda mano que en tienda. Pero, ¿hasta donde debe ascender ese pellizco? ¿A venderme una carta seis veces más cara que lo que el socorrido dogma de la oferta y la demanda determina?
Esas mismas tiendas (y sus adláteres) son las que constantemente nos bombardean con la idea de que tenemos que apoyar a las tiendas y gastar en ellas, porque si no cerrarán y ¡a ver donde íbamos a jugar entonces!
Vale, vale, te compro esa idea. Pero, si esas tiendas están adulterando los precios creando una inflacción irreal que (entre otras efectos negativos) impide la entrada de nuevos jugadores... ¿no están también atacando a la salud del juego?
En todas las partes cuecen habas, pero antes de acusar a nadie de perro traidor deberíamos mirarnos las vigas y darnos cuenta de que, si alguien descubre que le hemos estado engañando durante años, no va a estar muy contento con nosotros y que su sentimiento de lealtad se verá seriamente quebrantado.
Todo esto en relación al mercado secundario. Pero parece que la multa de la Comisión Nacional de la Competencia no iba por ahí, si no hacia el modo en que estas tiendas pretendían vender el material sellado (sobres y cajas).
Por ahí he leído que lo que pretendían era bajar el precio para beneficiar a los consumidores. Tal afirmación -he de reconocerlo- me ha parecido entre naïf y despreciable (dependiendo de si quien la sostiene es un cándido inocentón o alguien que sabe de qué va el marrón y quiere maquillarlo por vaya a saber usted qué intereses). Nadie hace una reunión secreta que ríase usted de cualquier logia adoradora de Cthulhu para decidir bajar los precios: cambias las etiquetas de tu tienda y listo.
No, aquí el asunto parece tener un cariz bastante más sórdido. Obviamente las distribuidoras conceden un mayor margen a las tiendas que les compran más material. Esas tiendas disponen de ese margen adicional para variar sus precios, recurso del que carecen las tiendas más pequeñas. Si esas tiendas grandes se reúnen pueden decidir conjurar en conciliábulo un poderoso y oscuro hechizo llamado "Fijación de Precios Predatorios".
O explicado de una forma más mundana: si en una ciudad donde hay cinco tiendas dos de ellas deciden vender a 3€ el producto que las otras venden por 4€ se van a llevar toda la clientela. Hacerlo libremente cada uno por su cuenta está bien. Reunirse para hacerlo en comandita está perseguido por la ley.
En fin, que aquí nadie se queja porque Superchachi Megastore quiera vendernos algo más barato. El tema de fondo es que ciertas empresas -de las que la comunidad de jugadores siempre ha sospechado que estaban involucradas en una fijación subjetiva e interesada de precios en las revistas especializadas- han sido multadas por quebrantar el artículo primero del título primero de la Ley de la Defensa de la Competencia (leguleyos aquí).
PS. Lo siento por el tocho. Las cartas elegidas para ilustrar este artículo han sido seleccionadas con toda la intención :P
No voy a copypastearla cuando puedo dejaros en enlace aquí (por si acaso mirror aquí, aquí y aquí). Cuando la leáis volvéis y seguimos en el blog.
¿Enterados? ¿Sí? Pues vamos adelante con la parte de opinión...
La teoría es que el mercado secundario de Magic (es decir, la venta de las cartas una vez abiertos los sobres) está sujeto a las leyes de la oferta y la demanda. Como todo en la vida esto es así en teoría. ¿Por qué? porque (también como todo en la vida) las cartas están sujetas a valores especulativos.
Hay especulación a pequeña escala como, por ejemplo, cuando un particular abre un sobre, estima que X carta subirá de precio, y la guarda en un cajón para cambiarla o venderla cuando los tiempos sean propicios.
Esta es una acción particular que no es ni buena ni mala, y solo el tiempo y la capacidad de visión del interesado determinarán el éxito de su decisión sin afectar a nadie.
Pero, ¿qué pasa cuando quien se dedica a la especulación es una tienda? ¿y si es un grupo de tiendas importantes? ¿y si es una tienda MUY grande? ¿y si esas tiendas convierten sus precios subjetivos en precios reales?
En los oscuros días del inicio de internet (o -aun peor- en aquella especie de Mordor triunfante que era el mundo antes de internet) nadie podía dar un valor objetivo a las cartas. Sabíamos que una carta era rara, infrecuente o común y -aunque claramente veíamos que unas cartas eran mejores que otras aun dentro de su mismo nivel de rareza- cuando realizábamos un cambio lo hacíamos añadiendo cartas a la balanza hasta que ambos jugadores estaban satisfechos.
Todo eso cambió cuando empezaron a aparecer revistas especializadas. Estas revistas incluían en cada entrega un listado completo de las cartas existentes así como su valor (por aquel entonces en pesetas). Aquello era estupendo, ahora nadie iba a timarnos porque conocíamos el valor real de nuestras cartas.
¿Real? No tan deprisa, amigo. Indudablemente la oferta y la demanda tenían un papel importante en este asunto; si un Black Lotus es muy raro (hay pocos ejemplares) y mucha gente lo quiere su precio subirá. Pero, ¿y si una de las partes interesadas estaba en situación de adecuar el precio "oficial" a sus propios intereses?
No voy a dar nombres diciendo que determinada(s) tienda(s) lo hacían con alevosía: quedaría feo que fuese tan evidente. Pero siempre ha sido un secreto a voces que determinada(s) tienda(s) de Madrid estaban detrás de todo aquel asunto editorial.
Al principio no nos dábamos cuenta, claro. Estábamos ocupados haciendo Channel-Fireball o sufriendo el mazo de Stasis+Serra Angel de algún amiguete, pero el tiempo nos ha dado la madurez y la perspectiva para darnos cuenta de quién estaba detrás del teatrillo de títeres.
Aquel chiringuito ha funcionado estupendamente hasta que los jugadores empezaron a utilizar internet para cambiar y -sobre todo- vender cartas. En un principio fue por eBay (y aun se sigue vendiendo allí), pero la hecatombe llegó con Magic Card Market.
¿Qué es Magic Card Market (en adelante MKM por sus siglas germanas)? MKM es una plataforma diseñada por un vendedor profesional alemán. En ella cualquiera puede vender y comprar cartas, directamente entre particulares o entre los vendedores profesionales que quieran participar de este mercado. Tú pones el precio y a quien la parezca bien te lo compra. Tan fácil (quítame allí una pequeña comisión por parte de MKM [y de PayPal, claro] porque esto tampoco es por amor al arte).
Y con MKM llegó el escándalo. Las tiendas estaban que echaban pestes. Muy reseñablemente tiendas grandes de la capital del reino. Tiendas que estaban detrás de las revistas. Y/o tiendas como las que han sido sancionadas por la Comisión Nacional de la Competencia.
¿Qué pasaba? Pues que la oferta y la demanda empezaban a funcionar sin intoxicaciones. Y es que a todos nos encanta el capitalismo y el libre mercado cuando las perspectivas son buenas pero, cuando nos vienen dadas, ¡oiga! póngame usted unos aranceles o haga algo.
Está claro que algunas cartas, como las tierras dobles (también llamadas duals), eran caras porque hay pocas y hay mucha demanda. Pero, ¿y las cartas que fueron buenas, hay pocas, pero que ahora no juega nadie?
Ahí, amiguetes, es donde se ve claramente de qué va esto de la especulación por parte de las grandes tiendas.
Pondré un ejemplo: el morfoide. El morfoide es un bicho que era la leche. Hará unos ocho años... porque ya no lo juega nadie. Es decir, la demanda es nula. Si la demanda es nula el precio debería caer. No digo yo que lo regalen a 1 euro, lo que digo es que nos fijemos en MKM y cómo los particulares valoran esa carta.
A día de hoy los precios de un morfoide en MKM oscilan entre los 2,5 y los 4 euros (tienes alrededor de 100 disponibles a ese precio, cualquier zumbado está en su derecho de pretender venderlo a 10).
Miremos -también a día de hoy- el precio del morfoide en dos de esas tiendas madrileñas multadas por prácticas comerciales ilegales: entre 14 y 20 euros. Llamativo, ¿verdad?
Frecuentemente (y no hace mucho en un conocido podcast) oímos a esas tiendas quejarse de que sus precios son más caros porque ellos tienen una serie de gastos inherentes (impuestos, alquileres...) y en MKM cualquier particular vende las postalitas que le sobran. Es un hecho claro y sin contestación posible, todos sabemos que es más barato comprar un producto en fábrica o de segunda mano que en tienda. Pero, ¿hasta donde debe ascender ese pellizco? ¿A venderme una carta seis veces más cara que lo que el socorrido dogma de la oferta y la demanda determina?
Esas mismas tiendas (y sus adláteres) son las que constantemente nos bombardean con la idea de que tenemos que apoyar a las tiendas y gastar en ellas, porque si no cerrarán y ¡a ver donde íbamos a jugar entonces!
Vale, vale, te compro esa idea. Pero, si esas tiendas están adulterando los precios creando una inflacción irreal que (entre otras efectos negativos) impide la entrada de nuevos jugadores... ¿no están también atacando a la salud del juego?
En todas las partes cuecen habas, pero antes de acusar a nadie de perro traidor deberíamos mirarnos las vigas y darnos cuenta de que, si alguien descubre que le hemos estado engañando durante años, no va a estar muy contento con nosotros y que su sentimiento de lealtad se verá seriamente quebrantado.
Todo esto en relación al mercado secundario. Pero parece que la multa de la Comisión Nacional de la Competencia no iba por ahí, si no hacia el modo en que estas tiendas pretendían vender el material sellado (sobres y cajas).
Por ahí he leído que lo que pretendían era bajar el precio para beneficiar a los consumidores. Tal afirmación -he de reconocerlo- me ha parecido entre naïf y despreciable (dependiendo de si quien la sostiene es un cándido inocentón o alguien que sabe de qué va el marrón y quiere maquillarlo por vaya a saber usted qué intereses). Nadie hace una reunión secreta que ríase usted de cualquier logia adoradora de Cthulhu para decidir bajar los precios: cambias las etiquetas de tu tienda y listo.
No, aquí el asunto parece tener un cariz bastante más sórdido. Obviamente las distribuidoras conceden un mayor margen a las tiendas que les compran más material. Esas tiendas disponen de ese margen adicional para variar sus precios, recurso del que carecen las tiendas más pequeñas. Si esas tiendas grandes se reúnen pueden decidir conjurar en conciliábulo un poderoso y oscuro hechizo llamado "Fijación de Precios Predatorios".
O explicado de una forma más mundana: si en una ciudad donde hay cinco tiendas dos de ellas deciden vender a 3€ el producto que las otras venden por 4€ se van a llevar toda la clientela. Hacerlo libremente cada uno por su cuenta está bien. Reunirse para hacerlo en comandita está perseguido por la ley.
En fin, que aquí nadie se queja porque Superchachi Megastore quiera vendernos algo más barato. El tema de fondo es que ciertas empresas -de las que la comunidad de jugadores siempre ha sospechado que estaban involucradas en una fijación subjetiva e interesada de precios en las revistas especializadas- han sido multadas por quebrantar el artículo primero del título primero de la Ley de la Defensa de la Competencia (leguleyos aquí).
PS. Lo siento por el tocho. Las cartas elegidas para ilustrar este artículo han sido seleccionadas con toda la intención :P
Un articulo muy interesante el tuyo Endakil. De cualquier manera eso no se aplica solo al mundo del Magic, y creo que en realidad, el ejemplo más claro es en el mundo de la música.
ResponderEliminarInternet trajo un nuevo paradigma en las relaciones comerciales entre particulares; y como en todo cambio de paradigma, hay perjudicados que intentan con todas sus fuerzas mantener el status quo.
La verdad que es un tema que da para discutir largo y tendido.
Me temo que nos tocará vivir tiempos interesantes en internet.
EliminarO la contaminan para convertirlo en un mass media más o seguirán pretendiendo criminalizarlo más (ya sabes, repetir mil veces la mentira de "compartir es ilegal" hasta que cada vez más idiotas piensen que es verdad).
En este caso internet ha ayudado. Y en muchos otros. De verdad creo que internet ha sido lo más importante que le ha pasado a la cultura universal desde la Biblioteca de Alejandria.
Además incluye porno y gatos.
Muy interesante. Por un lado, muy instructivo sobre cómo está funcionando el mundo en general.
ResponderEliminarPero en cuanto al tema de las tiendas frikis... yo he visto naves en llamas más allá de Orión. Cosas muy, muy rastreras. De todas formas quiero decir que hay otras (normalmente las más pequeñas) que no se merecen llevarse la mala fama.
¿Verdad? No podía dejar de pensar en Standard & Poor's y Moody's XD
EliminarHe vivido al otro lado del mostrador y he visto mierda y mezquindades hasta niveles escalofriantes. No sé si tanto como rallando la ilegalidad, pero sin duda pisoteando la ética.
Si que hay tiendas que merecen toda loa posible. Aquí tenemos El Barbas. Lleva dedicándose a estas cosas desde alrededor de 1994 a su modo inefablemente peculiar y casi hippy. Su política es "prefiero perder dinero y que la gente este contenta, si están contentos volverán".
Un tiempo después abrieron otra tienda con muchos aires. El dueño (un tipo que se creía todo un tiburón de las finanzas) consideraba que El Barbas no tenía ni p*ta idea y que él iba a alcanzar las más altas cotas de grandeza en la industria friki.
En unos añitos cerró. Y El Barbas ahí sigue, con una clientela que -¡agárrense!- se puede decir que hasta le quieren (no homo, bitches).
Pero, bueno, el karma no siempre es tan eficaz. Alguna tienda conozco que sigue en funcionamiento y se merecería lo peor. Lo peor o que, al menos, realmente el público (y otras tiendas) supiese realmente lo que se cuece.
De todos modos noticias como esta alegran el día :)
Puf,del mercado de segunda mano de Magic he oído mil historias y a cada cual peor. No sabia que habían llegado ya a esos extremos el tema.
ResponderEliminarMenos mal que Internet esta arrojando mucha luz a donde algunos solo quieren que existan sombras.
El mercado secundario es criticable desde un nivel ¿ético? ¿de sentido común?, pero aquí les han metido caña por el material sellado donde todo era más evidente.
Eliminar¿Alguna tienda perjudicada?¿algún cliente insatisfecho? Enhorabuena al denunciante en cualquier caso.
Internet es una joya tan extraordinaria, un regalo tan inesperado, que (como decía) temo mucho que nos lo quiten.
Voy a ponerme poético/friki: internet es como un silmaril :D
Increíble.
ResponderEliminarSi no lo veo,no lo creo...
Entrada invitada esta semana que entra...
Ya podían salir a la luz (¡y a la justicia!) muchas otras miserias del mundillo friki en general.
EliminarGracias caballero, un honor :)
Jojojojoo, madre mía que ponzoña de mundo. Sinceramente me encanta la noticia, tenga las consecuencias que tenga finalmente. ¡Ya está bien de cachondeo, hombre, que somos frikis pero no idiotas!
ResponderEliminarIgual para alguno ya es tarde. Demasiado lejos en el camino de la idiotización :P
EliminarPero sí, es una alegría de noticia.
Opps! Estaba siguiendo esta noticia por Magicmadrid y no he visto tu entrada.
ResponderEliminarTal y como dices, el hecho en sí es ilegal. Ayer comprobé las webs de esas tiendas, y ninguna ha hecho declaraciones oficiales al respecto. (Normal, si yo fuese su abogado, les habría dicho que no abriesen la boca.)
La especulación dentro de magic es un triste hecho, y no solo viene impuesta por tiendas españolas, si no que monstruos como Starcity games (Con una relación privilegiada y demostrada con Wotc) se encargan de fomentar. Si, incluso starcity, se metió a comprar cartas en Mkm, toma intervención en el mercado. (O cuando Wotc recompró cartas para re-ensobrarlas en Zendikar)
Y es que el mercado de magic, nacido de un monopolio evidente, siempre ha sido un asunto turbio, con prácticas bastante al límite. Esto no justifica la actitud de estos actores, pero hace que nadie de los que llevamos tiempo en esto se extrañe.
En cuanto a la infracción en concreto, me parece tan burda, tan inocente, (Se han estampado contra el primer artículo de la ley de competencia, primer apartado, primera letra. Un precepto de sentido común para alguien que se dedica a esto.) que me cuesta pensar que había una intención delictiva clara en esto. O quizá es que tenían una confianza ciega en que no les iban a meter mano.
Pero el hecho es que yo no estaba allí. Desconozco los términos que se discutieron, así como las intenciones de la gente. En esto nos llevas ventaja: tienes experiencia en el sector, y sabes mejor como funcionan las cosas.
He tenido relación comercial, creo recordar, con tres de las multadas. He de decir que, si bien son caras, el servicio ha sido muy bueno en dos de ellas. En la tercera tuvieron algunos fallos. (Pedí cartas con una ilustración determinada y me mandaron otras. Pero, al no ser artículos de gran importe, decidí que no merecía la pena montarla...)
El barbas es un zorro, pensemos lo que pensemos, y desde que ordenó la tienda, estoy seguro de que su negocio va hacia arriba. Pero, tal y como dices, propone tratos justos, en los que el gana (en general), pero no da esa sensación de precio-estafa que se ve por ahí.
Como dices, me parece una resolución correcta, siempre que este bien fundamentada. Y es que no he visto todavía la resolución completa.
Sí, cuando hablaba de una tienda "MUY grande" estaba refiriéndome a Star City Games :)
EliminarEstas tiendas cuidan el factor calidad muy bien. Labores como la que están haciendo en Youtube comentando partidas es algo que les honra. Pero todo esto... pues muy mal.
Tú me sabrás decir si delito o falta administrativa, yo de leyes voy justito (estuve de mecanógrafo para unos procuradores, pero no te creas que se me pegó mucho :D).
Después de trabajar al otro lado del mostrador lo que te puedo decir es que se me cortó la vena romántica con el mundillo friki. Muchas miserias, muchos actos éticamente reprobables y muchos "comunistas de salón" por así decirlo. Y las alianzas para pisar al vecino. Delirios de grandeza everywhere.
En principio, y con los datos que tengo es infracción, mas que nada por que, para ser delito debería de haber pasado por un tribunal de lo penal, y debería haberse hecho referencia a algún artículo del código penal, que lo recogiese como hecho delictivo.
EliminarLa cnc, te hablo de memoria, tiene carácter administrativo, así que resuelve sobre materia de competencia, y por ello, lo que recoge son "infracciones" a la ley.
En el código penal se recoge una serie de delitos contra el mercado, les he echado una ojeada, y esto no entra en los supuestos ni con calzador.
Gracias por la aclaración. Que no se diga que no hablamos con propiedad :)
EliminarOstias, no sabia que esto de los "cartones" funcionara de esta manera. Pobre de mi que siempre he jugado entre colegas y no me coscaba de lo que se movia alrededor de la magic, xD
ResponderEliminarYo siempre me lo he tomado como una aficion, nunca he pretendido lucrarme con ello. Antes cuando cambiaba cartas los hacia por aquellas que me pareceian mas utiles para un mazo concreto o que simplemente me gustaban para tenerlas en el album, pese a que los "jugadores profesionales" lo hacian siempre con la lista de precios en la mano.
Nunca he entendido, ni entenderé, que por un carton con un dibujo se puedan pagar autenticas burradas, pero bueno, cada uno hace lo que quiera con su dinero, xD
Un saludo y gracias por dar un poco de luz sobre la noticia.
Bueno, supongo que podrán decir que es como lo de los sellos ^_^
EliminarQue lo hagan las tiendas se puede entender, pero los que se creen brokers especulando con carticas dan un poco de pena, la verdad :P
Yo decidí vender mis últimas cartas de Magic a través de un amigo que tiene su tienda en eBay, y la verdad es que al final he ganado más de 800€. Y eso que incluía cartas de The Dark, Serie Beta borde negro, y alguna Legendary así como cartas más modernas y bastantes tierras dobles
ResponderEliminarRecuerdo que la anterior venta de Magic la hice en pesetas. Yo era un habitual de torneos en Barcelona en los '90, pero me harté y decidí que el Magic me quitaba tiempo para jugar a Rol, por lo que dejé el tema... Aparte de que había superfrikis del tema, muy pesados ellos, y mucho mamoneo tanto en los torneos como en la compra-venta.
Y ya entonces me pareció una tomadura de pelo saca-cuartos al estilo de las tragaperras o el Bingo.
La denuncia fue realizada en el 2011 y 4 años después se resuelve. MKM hace 4 años no era ni el 10% de lo de ahora. Hace 4 años puede que estas tiendas controlacen precios y que los jugadores (que no conocían en 2011 ni por asomo MKM) cambiasen sus cartas o las vendieran (o tiendas mas pequeñas) al precio que estas tiendas tenian en internet. ok. El problema de ahora ya no son estas tiendas, ni ningunas otras, el problema son las distribuidoras. Por que? Por que si yo soy distribuidor y vendo un producto sellado a tiendas, pero estas venden estos productos por encima de su precio de mercado por el contenido de los mismos, por que el distribuidor vendería a las tiendas a precio distribución algo que pueden hacer ellos mismos en MKM o en otros mercados?. De hay que productos de reciente salida su precio se ha incrementado un 50% sobre productos similares de otros años y que las tiendas no lo tengan. Por que el distribuidor vendería un producto a 20 euros a tiendas para que vendan a 30 si el contenido del producto se vende en MKM a 45?... El problema ahora es que los distribuidores son tiendas y si el producto en mercado sale mas rentable vender como tienda que como distribuidor lo venderán como tienda en MKM u otras paginas y los jugadores pagaran mas y las tiendas no venderán... El Magic sin tiendas no existe y los distribuidores sin tiendas tampoco. Pero como ya han comentado aquí esto se ve en cualquier otro tipo de mercado
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