Dungeons & Dragons: Daggerdale

El otro día me dio por jugar a  D&D: Daggerdale. Lo tenía instalado, jugué algunos minutos y, por alguna razón se quedó ahí olvidado (suele ser tener algo que pintar o estar con un juego mejor). No sé por qué me animaría a retomarlo teniendo aun sin terminar el Skyrim, pero bueno.

Daggerdale es un hack and slash con ligerísimos toques de rol que, de algún modo, podría recordar lejanamente a la duología de Mystara que disfrutamos en las recreativas. Todo esto podría haber estado muy bien si el proyecto no hubiese dado lugar a un juego mediocre tirando a decididamente malo. Vamos, que podría haber estado bien si no se notase tanto su bajo presupuesto y su inenarrable cantidad de bugs.

Y es que Daggerdale está lleno de bugs por todas partes. Fallos en la IA, enemigos que mueren y se quedan en pie, sitios por los que no podemos pasar, texturas fallidas, equipo que nos convierte en drows de 8 bits...
Todo ello da al título un aspecto cutre que no puede quitarse de encima. Es, como se ha comentado, como si estuviésemos siendo betatesters de un juego aun en programación.
A todo ello hay que añadir que los gráficos justitos (parecen de hace 8 años) y la falta de voces en los diálogos (todo se reduce a un ridículo "uhmmm, mmmm, mmmm"), no ayudan precisamente a mejorar nuestra percepción del juego. Todo ello sin contar lo poco fluido y lo artificial de los combates.

En Daggerdale no podemos -por supuesto- ni soñar con la posibilidad de crear nuestro propio personaje (esto no es Baldur's Gate, amigos). En vez de eso debemos escoger uno de los cuatro personajes pregenerados: guerrero humano, clérigo enano, mago halfling y pícara elfa.
El juego es -dicen- una versión accesible de la 4ª edición de D&D. Lo cual no tendría que ser necesariamente malo porque, aunque como juego de rol sea una fustaña, lo que es la parte pega-pega no tendría por qué ser mala traducida a un videojuego (al fin y al cabo 4ª es un videojuego). Pero resulta que ni aun así. Las dotes son limitádisimas (que solo podamos llegar hasta nivel 10 tampoco ayuda) y hay un montón de cosas ridículas que, supongo, vendrán de 4ª... como que la pícara pueda llevar escudos.

Por lo demás mencionar que está ambientado en Daggerdale (oh, sorpresa) en el setting de los Reinos Olvidados después del cataclismo perpetrado por Wizards of the Coast (al menos eso he sospechado por lo que entendía del "trasfondo" mientras jugaba).
Un juego, en resumen, solo para los más fans de D&D o para los -ya nostálgicos- fans de 4ª.
Os dejo con un vídeo ilustrativo.


Comentarios

  1. Pues entre que me lo pintas mal, el escenario de Reinos de cuarta es una gran M y el que tengo el emulador con el Tower of Doom y el Shadows of the Mystara... pues éso, que me quedo con el emulador de Mystara

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    1. Los dos de Mystara le dan varios miles de vueltas. Ni te molestes, Daggerdale no merece la inversión ;)

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  2. Ya podría salir otro Mystara con todas las posibilidades que hay ahora... Con sprites en alta resolución, niveles gigantes, DLC y editores, posibilidad de unirse un rato a la partida de un amigo... :)

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    1. Lo mismo rescatan Mystara como setting para 5ª ahora que quieren recuperar a los grognards :)

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