Por fin he tenido la ocasión de ver una película que despertó mi interés desde que se empezó a hablar de ella por la red. Se trata de la producción noruega Trolljegeren, de 2010.
El trasfondo de la película nos explica que los noruegos son unos tíos listos. Ya nos hacíamos una idea porque fueron lo suficientemente espabilados como para no meterse en la Euroestafa, pero aquí nos sorprenden una vez más: los trolls existen y el gobierno noruego lo ha sabido mantener en secreto. Y, más que eso, tienen una suerte de SEPRONA dedicado al control de las poblaciones de trolls, cuidando que no salgan de sus territorios y justificando algún ataque a granjas sacándose de la manga un cadáver de oso.
Todo esto se mantiene en secreto hasta que un grupo de estudiantes universitarios descubre todo el pastel durante la realización de un reportaje sobre la caza furtiva de osos.
Así pues se trata de un falso documental. El enésimo de este tipo desde el Proyecto de la Bruja de Blair. Avisados estáis para que estéis preparados para una buena ración de "bicho-cielo, cielo-bicho-zapatos, zapatos-bicho-cielo" en los momentos más trepidantes.
Lo mejor.
- El desfile de criaturas fantásticas. Los más frikis de entre los presentes os deleitaréis con una colección de ettins, jötuns y toda clase de trolls. Bastante bien hechos para lo modesto de la producción. Y no todos en penumbra en medio del bosque; el jötun que veis en el cartel se nos muestra en todo su esplendor durante el amanecer.
- La animadversión de los trolls hacia los cristianos. Uno de los detalles que más me divirtió, un guiño inverso, quizás, a Herr Mannelig. Los trolls no se alimentan de humanos, pero pueden oler a los cristianos y no les caen nada bien. Curiosamente también especulan si sucederá lo mismo con los musulmanes.
- La explicación científica a la naturaleza de los trolls. Una veterinaria nos cuenta por qué se convierten en piedra y la relación de todo ello con la metabolización de la vitamina D. Lo cual podría darnos una idea de por donde van los tiros en cuanto a que coman piedras (uhmmm delicioso calcio) o no.
- La maravillosa fotografía. Al menos cuando la cámara se tranquiliza un poco. Un precioso atracón de bosques, montañas y fiordos que nos harán soñar con unas vacaciones nórdicas.
- La anécdota del troll que intentaba comerse su propia cola.
Lo peor.
En general todo lo malo que puedo decir sobre esta película gira en torno al guión y la relación de los personajes. En varias ocasiones suceden ciertos acontecimientos que trastocan la trama y que no se justifican a través de los personajes. A lo mejor es algo que yo no entiendo debido a cierta barrera cultural y a que los nórdicos son así de volubles y pragmáticos, pero lo cierto es que me hicieron vivir situaciones WTF. Daré un par de ejemplos (ALERTA SPOILERS):
- El furtivo -que resulta ser en realidad miembro del servicio del SEPRONA troll- se comporta como una tonadillera española implicada en un caso de corrupción ante la llegada de los jóvenes universitarios que lo acosan al más puro estilo paparazzi. De pronto le da el siroco y pasa a colaborar totalmente con ellos porque ha pensado que sus condiciones laborales son propias de un español y decide que quiere hacer una denuncia pública a través de estos jovenzuelos y sus cámaras. Como si un empleado del Área 51 le contase todo el rollo conspiranoico a Michael Moore porque ha concluido que cobra poco.
- Un grupo de trolls le da matarile al cámara porque, bueno, resulta que es cristiano. La reacción de sus amigos: "Nooo... ¡han matado a Kalle! Bueno, llamamos a la universidad para que nos manden otro cámara". Así, tal cual. Como si hubiesen matado a su PJ y le hiciesen rellenar otra ficha en un momento.
Cazador de Trolls es, en conclusión, una película sencilla, sin muchas pretensiones, pero de esas que gustan en Sitges. Y, considerando la temática, apuesto a que también gustará mucho al friki medio. A mi desde luego me ha gustado. Y me ha hecho recordar el año que pasé intentando estudiar bokmål.
Recomendable para una tarde de domingo.
El trasfondo de la película nos explica que los noruegos son unos tíos listos. Ya nos hacíamos una idea porque fueron lo suficientemente espabilados como para no meterse en la Euroestafa, pero aquí nos sorprenden una vez más: los trolls existen y el gobierno noruego lo ha sabido mantener en secreto. Y, más que eso, tienen una suerte de SEPRONA dedicado al control de las poblaciones de trolls, cuidando que no salgan de sus territorios y justificando algún ataque a granjas sacándose de la manga un cadáver de oso.
Todo esto se mantiene en secreto hasta que un grupo de estudiantes universitarios descubre todo el pastel durante la realización de un reportaje sobre la caza furtiva de osos.
Así pues se trata de un falso documental. El enésimo de este tipo desde el Proyecto de la Bruja de Blair. Avisados estáis para que estéis preparados para una buena ración de "bicho-cielo, cielo-bicho-zapatos, zapatos-bicho-cielo" en los momentos más trepidantes.
Lo mejor.
- El desfile de criaturas fantásticas. Los más frikis de entre los presentes os deleitaréis con una colección de ettins, jötuns y toda clase de trolls. Bastante bien hechos para lo modesto de la producción. Y no todos en penumbra en medio del bosque; el jötun que veis en el cartel se nos muestra en todo su esplendor durante el amanecer.
- La animadversión de los trolls hacia los cristianos. Uno de los detalles que más me divirtió, un guiño inverso, quizás, a Herr Mannelig. Los trolls no se alimentan de humanos, pero pueden oler a los cristianos y no les caen nada bien. Curiosamente también especulan si sucederá lo mismo con los musulmanes.
- La explicación científica a la naturaleza de los trolls. Una veterinaria nos cuenta por qué se convierten en piedra y la relación de todo ello con la metabolización de la vitamina D. Lo cual podría darnos una idea de por donde van los tiros en cuanto a que coman piedras (uhmmm delicioso calcio) o no.
- La maravillosa fotografía. Al menos cuando la cámara se tranquiliza un poco. Un precioso atracón de bosques, montañas y fiordos que nos harán soñar con unas vacaciones nórdicas.
- La anécdota del troll que intentaba comerse su propia cola.
Lo peor.
En general todo lo malo que puedo decir sobre esta película gira en torno al guión y la relación de los personajes. En varias ocasiones suceden ciertos acontecimientos que trastocan la trama y que no se justifican a través de los personajes. A lo mejor es algo que yo no entiendo debido a cierta barrera cultural y a que los nórdicos son así de volubles y pragmáticos, pero lo cierto es que me hicieron vivir situaciones WTF. Daré un par de ejemplos (ALERTA SPOILERS):
- El furtivo -que resulta ser en realidad miembro del servicio del SEPRONA troll- se comporta como una tonadillera española implicada en un caso de corrupción ante la llegada de los jóvenes universitarios que lo acosan al más puro estilo paparazzi. De pronto le da el siroco y pasa a colaborar totalmente con ellos porque ha pensado que sus condiciones laborales son propias de un español y decide que quiere hacer una denuncia pública a través de estos jovenzuelos y sus cámaras. Como si un empleado del Área 51 le contase todo el rollo conspiranoico a Michael Moore porque ha concluido que cobra poco.
- Un grupo de trolls le da matarile al cámara porque, bueno, resulta que es cristiano. La reacción de sus amigos: "Nooo... ¡han matado a Kalle! Bueno, llamamos a la universidad para que nos manden otro cámara". Así, tal cual. Como si hubiesen matado a su PJ y le hiciesen rellenar otra ficha en un momento.
Cazador de Trolls es, en conclusión, una película sencilla, sin muchas pretensiones, pero de esas que gustan en Sitges. Y, considerando la temática, apuesto a que también gustará mucho al friki medio. A mi desde luego me ha gustado. Y me ha hecho recordar el año que pasé intentando estudiar bokmål.
Recomendable para una tarde de domingo.
LA pelicula la vi hace un tiempo, y curiosamente comparto tu opinion acerca de los puntos positivos y negativos de la misma. Eso si, supongo que los giros extraños en el guion vienen dados sencillamente porque era necesario que el del SEPRONA fuera un tipo que intenta ocultar su trabajo, pero a la vez era necesario que explicara todo el pitote. Lo del camara muerto pues si, WTF.
ResponderEliminarLo mejor, para mi, el trailes, con el del seprona apareciendo entre la maleza en plena medianoche y gritando... TROOOOOOOOOOOOLL
Además, dicho trailer viene muy a cuento para reirse del tipico troll internetero :-P
Ese grito me hizo acordarme de Moria por alguna razón ^_^
Eliminar¡Muy interesante!
ResponderEliminarY la pregunta del millón:
¿Está en español?
Está en español, pero tendrás que buscarla. Para ello habrás de descubrir el secreto de los trolls:
Eliminar"Desde las montañas noruegas se precipita al fiordo un torrente caudaloso; busca allí y encontrarás tu salmón".
;)
Muy bueno, localizado y descargando.
EliminarNunca he visto una peli en dual Noruego-Español ;)
Pero hombre, claro que existen los trolls, sólo hay que darse una vuelta por ciertos sitios de Internet xDD
ResponderEliminarTiene que estar curiosa la película, gracias por comentarla, me la apunto a ver si la localizó por ahí ;-)
Por cierto que después de leer todo eso no puedo evitarlo: están locos estos vikingos xD
saludos! :)
Imagino que estoy entonces hablando con un cazador de trolls XD
Eliminaruhhhhhhhh interesante.....
ResponderEliminar¡A la lista de pelis para ver! pero esta asciende directamente a la primera posición por motivos obvios, jajaj
Un saludo.
Sigue entonces el enigma que le he puesto a Slorm ;)
EliminarGenial reseña Endakil (menos la parte de los spoilers que no la he leido por si las moscas jajaja).
ResponderEliminarComo amante del cine fantástico sólo comentar que llevo un años tras esta película y me he decidido a verla por tu entrada! PAsa que con el cierrre de megaupload uno ya no sabe que hacer...
Ya me las apañare!
Se puede encontrar por ahí a pesar de que ya no esté Megaupload ;)
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